lunes, 8 de febrero de 2010

Ouka Leele Inédita

Jueves 21 de enero. Dejo mi bici en casa y me subo en el metro (cosa extraña) rumbo a l'Hospitalet para asistir a la inauguración de la exposición de una fotógrafa cuyo nombre me suena mucho pero cuya obra prácticamente desconozco. Desde entonces y hasta el 11 de abril se expone en el Centre d'Art Tecla Sala la muestra Ouka Leele Inédita, la primera de gran tamaño dedicada a la fotógrafa en Cataluña. Producida por el Ministerio de Cultura, la exposición «presenta una selección de su obra más íntima, esencial y reciente».


Photobucket
A working class heroe (1985)


Los grandes espacios de techos altos nos permiten movernos con libertad y observar con tranquilidad la amplísima selección de obras, no solo individualmente sino también en relación a sus compañeras de sala. La muestra no está organizada de manera cronológica, lo cual resulta especialmente interesante: las asociaciones y relaciones que se establecen entre los distintos trabajos van más allá de la técnica, la época o el estilo, asociando las imágenes mediante una apelación a los sentidos y a la emoción que generan las obras.


Photobucket
Generoso encuentro con la belleza (2007)


Photobucket
La luz de su pierna, me hace suspirar (2007)


Belleza, sensualidad e intimidad son los rasgos que comparten algunas imágenes, que nada tienen que ver con otras áreas de la exposición, más centradas en el intimismo, el mundo de la farándula o en la propia artista. El gran hilo conductor no es otro que «la búsqueda de lo que somos, de su sentido escenográfico y pictórico que [...] potencia su particular visión del misterio humano».

Destaco especialmente sus autorretratos y las imágenes que sugieren la intimidad de su casa como Quiero saber quién soy de 1982, Autorretrato de fotógrafa de 1978 o Un lugar perfecto para un retrato de familia de 1986, que extrañamente me parecen precursores de todo ese movimiento "exhibicionista" que han generado fenómenos como Facebook, Fotolog y otros, así como el maravilloso humor que desprenden la mayoría de sus fotografías (véase La huella de una mano en el respaldo del sofá de 1988 -quizá mi favorita, o Rana alucinada con mi pie ante vendedora de lechugas, impasible de 1975).


Photobucket
Autorretrato de fotógrafa (1978)


Photobucket
Rana alucinada con mi pie ante vendedora de lechugas, impasible (1975)


Una exposición que invita a reflexionar y a regodearse en la belleza a partes iguales, sin pretensiones y con resultados. Subíos al metro, que vale la pena.




Puntuación en la Escala M de Exposiciones: 9 sobre 10
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...